El oro es una de las más inversiones destacadas de los últimos días. Con un fuerte impulso que le ha permitido alcanzar los US$1.275, la onza ha ganado más de US$25 en poco más de 48 horas, y las perspectivas para las próximas jornadas bursátiles son alentadoras para que el metal dorado siga capitalizando ganancias.
Con un fuerte posicionamiento producto de las tensiones geopolíticas globales, más particularmente la situación en Siria y en la península coreana, el oro ha despegado con una velocidad que invita a pensar que el camino hacia los US$1.300/oz está más cercano que el piso de los US$1.250/oz.
En el ámbito netamente geopolítico, el Gobierno de EE.UU. desea que el presidente Al-Assad de Siria abandone su cargo, pero Rusia brinda apoyo a uno de los principales líderes de Medio Oriente. Mientras tanto, en el Lejano Oriente la tensión sigue en aumento luego de sucesivas pruebas de lanzamiento de misiles por parte de Corea del Norte, a lo que se agrega el envío de navíos de EE.UU. a la península coreana.
El receso de Pascuas hará que los inversores tomen una actitud conservadora, ello potenciado por la revalorización de algunas monedas frente al dólar, como el caso del yen. Los inversores observan que el oro comienza a ganar nuevamente un rol protagónico como sitio de resguardo frente a la desvalorización de las monedas, especialmente el dólar, ello de momento que el oro está nominado en la moneda estadounidense.
Luego de haber alcanzado el máximo registro en cinco meses, los analistas interpretan que los próximos objetivos a alcanzar son los US$1.279/oz., y la posibilidad de US$1.287/oz., todo ello en el corto plazo.
En la misma sintonía, la onza de plata superó el promedio móvil de los últimos 200 días, lo que permitió cotizar por encima de los US$18, para posicionarse en los US$18,55. Al igual que el oro, los analistas estiman un buen futuro para este metal, siendo el próximo valor a alcanzar los US$19,25/oz.