Así lo señaló la compañía Fortuna Silver Mines en el marco de los resultados financieros consolidados para el segundo trimestre de 2020, emitido el jueves pasado. Jorge A. Ganoza, presidente y director ejecutivo de la firma, comentó: “Aunque la volatilidad sin precedentes y los cierres obligatorios del gobierno durante el segundo trimestre han resultado en una pérdida neta de US$5,7 millones, nuestros planes de reducción de costos e inversiones nos han permitido mantener una posición neutral de flujo de efectivo libre de las operaciones en curso. En Lindero esperamos el inicio del riego en pilas a medida que avanzamos hacia un primer vertido de oro al final del tercer trimestre». El 28 de abril, la compañía presentó y recibió la aprobación de su Programa de Operaciones Mínimas de Emergencia, que le permitió reanudar las actividades de construcción en Lindero, provincia de Salta.
En cuanto a las inversiones de capital y el gasto total a la fecha en Lindero, Fortuna Silver invirtió US$294,4 millones (US$268,2 millones en 2019 y US$26,2 millones en 2020) de los US$300,7 millones estimados para finalizar la construcción del que será el primer proyecto aurífero a cielo abierto en la provincia de Salta. Mientras que en paralelo, la firma incurrió en gastos de US$22,3 millones relacionados a costos de preproducción, US$11,4 millones para mantener el inventario de repuestos, suministros y materiales y US$7,2 millones en gastos excedentes.
Al 30 de junio de 2020, la compañía estima que el financiamiento restante requerido para completar el proyecto, incluidos los gastos de preproducción, capital de trabajo y pagos del impuesto al valor agregado, estará en el rango de US$55 a US$60 millones hasta el inicio de las ventas de oro, durante la puesta en servicio de la mina en el cuarto trimestre de 2020.
Se espera que la producción comercial se lleve a cabo en el primer trimestre de 2021.