A pocas horas de que el Ministro de Energía y Minería de la Nación, Ing. Juan José Araguren abandonara el territorio chubutense en su primer intento presencial por rever la ley provincial 5001 que prohibe la minería a cielo abierto en la provincia, Chubut se quedó sin su equipo económico por internas de una región en crisis y con diferencias políticas marcadas.
Desde hace tiempo que la industria minera espera el visto bueno de la provincia de Chubut para rever una ley provincial que impide el desarrollo de la explotación de uno de los yacimientos de plata más grandes del mundo, situado en el Macizo Norpatagónico. Ante la asunción del Gobernador Arcioni, problemas políticos internos y un desfavorable escenario del crudo, los cañones apuntan a Proyecto Navidad como uno de los potenciales focos de desarrollo de la provincia, que de forma acelerada precisa una matriz más competitiva y amplia.
Ante este panorama, el Ministro de Energía y Minería, Juan José Aranguren, participó de una cumbre minera realizada en la provincia, de la que no participó el Gobernador, quien manifestó que «la decisión sobre el sí o el no a la minería lo tiene la ciudadanía».
Se trató de uno de los primeros intentos formales del Ministerio, con base a los requerimientos ejecutados por el Gobierno Nacional de promover las inversiones en el país, por intentar dar vuelta una página que impide la llegada de más de US$1.500 millones y la potencial creación de 3.600 puestos de empleo.
Por lo pronto, las comunicaciones con intendentes de la zona y el Estado se robustizan, y poco a poco el nombre de proyecto Navidad comienza a resonar en la población y sus dirigentes.