Han transcurrido 42 años desde el lanzamiento de PANORAMA MINERO. El medio periodístico ideado y llevado a la realidad por Enrique González ha evolucionado y crecido con el correr del tiempo: no solamente es el medio gráfico decano y líder de la industria minera argentina, sino uno de los primeros de su tipo en América Latina. La evolución de la industria minera derivó en que PANORAMA MINERO sumara nuevas líneas de negocios, siempre dentro del sector minero, como organizador de algunos de los más importantes eventos nacionales e internacionales.
Con pocos centros mineros en actividad, pero con una gran cantidad de ideas, PANORAMA MINERO avanzó en momentos en que la industria minera Argentina no dejaba de ser una promesa. Y es de esa promesa asociada intrínsecamente con el potencial del subsuelo argentino que Enrique González luchó y trabajó para mostrar una industria que es factor de desarrollo y transformación de los rincones más alejados de la patria, pero con fuerte amplificación a nivel nacional.
Una revista minera argentina, en la década de los ’70 podía surgir únicamente de la vocación comunicacional de un minero de pura cepa. Su paso por Mina Aguilar y la Asociación Obrera Minera Argentina (AOMA) le otorgaron una visión amplia respecto a cuáles eran las inquietudes, y hacia dónde se dirigía la industria en paralelo a la transformación del planeta.
Si existe algo que ha caracterizado a PANORAMA MINERO es enfrentar los nubarrones de incertidumbre surgidos en ciertos períodos de los últimos 42 años apostando por una palabra ya nombrada previamente: potencial. Al tratarse de una industria atípica en cuestión de tiempo para entregar valor a todos los involucrados, no se puede dejar de tener una mirada donde impere la visión a largo plazo y el optimismo.
En momentos donde no existía la comunicación digital que rige nuestras vidas en este preciso momento, la vocación de periodismo minero se sustentaba en tomar un anotador y una cámara fotográfica y recorrer incansablemente los pasillos de los organismos e instituciones que marcaban la senda minera. Pero, por sobre todas las cosas, transitar los polvorientos caminos de la Argentina profunda. Todas las provincias mineras fueron visitadas por Enrique González y por su equipo, informando la actualidad minera, lo que posibilitó avizorar un futuro, plasmado el mismo en las páginas de PANORAMA MINERO. En este contexto, las primeras ediciones de PANORAMA MINERO presentaban grandes promesas como Bajo la Alumbrera, Sierra Grande, Pachón, Agua Rica y Pirquitas, a través de planos y croquis desarrollados con tecnología muy distante al software que impera en estos tiempos.
Sin duda alguna, el punto de quiebre de la industria minera argentina es la sanción y promulgación de la Ley 24196 de Inversiones Mineras, instrumento jurídico tendiente a facilitar el ingreso de grandes capitales para desarrollar multimillonarias inversiones. Ello derivó en una oleada de nuevos proyectos que se extendió a las siguientes décadas: Cerro Negro, Veladero, Cerro Vanguardia, Cerro Moro, Gualcamayo, y una larga lista que también incluye emprendimientos de litio y de energía nuclear. De la misma manera el Tratado de Integración Minera entre Argentina y Chile encontró en PANORAMA MINERO al primer medio en comunicar no solo su existencia sino todo lo que se podría desprender de su aplicación.
La revista PANORAMA MINERO ha sido testigo del inicio de la consolidación de la industria minera, verdadero motor del desarrollo de las economías regionales, transformado positivamente en términos exponen- ciales. Y con mucho orgullo se puede afirmar que PANORAMA MINERO ha crecido con las empresas, siendo testigo del nacimiento de una nueva genera- ción de mineros argentinos con altos niveles de excelencia que les ha permitido trasponer los límites de nuestra Argentina.
Las bases establecidas por Enrique González con la fundación de PANORAMA MINERO en 1976 están en manos de una nueva generación encabezada por Celeste González, acompañada por un equipo multidisciplinario que siente la pasión por la comunicación y difusión de una industria altamente atrapante como la minería.